Frutoterapia: la técnica ideal que ayuda a metabolizar los azúcares

0
549
Frutoterapia
Frutoterapia

La frutoterapia es una técnica terapéutica basada en las sustancias medicinales de las frutas: proteínas, vitaminas, sales minerales y oligoelementos, etc., que ayudan a metabolizar los azúcares, los lípidos y las proteínas, además actúan en los órganos afectados. Las frutas son una fuente nutricional y curativa para los seres vivos.

Para aprovechar sus beneficios debemos comer con frecuencia frutas en crudo o en zumos

Se manejan clasificaciones en función de su naturaleza, estado, composición y características botánicas. Los frutos se originan por el desarrollo de una parte de la flor llamada ovario. Botánicamente, el primer paso para en la clasificación de los frutos consiste en diferenciar si provienen de una sola flor o de varias, dando lugar, este último caso a las infrutescencias.

Los frutos que provienen de una sola flor se dividen entre aquellos en los que en su formación han entrado órganos o elementos ajenos al propio ovario, lo que da lugar a frutos complejos, denominados pomo y pepónide, o los simples, formados únicamente a partir del ovario. Los frutos simples pueden ser a su vez, secos o carnosos.

BENEFICIOS

Para aprovechar los beneficios de las frutas debemos comer con frecuencia frutas en crudo o aprovecharlas para hacer zumos, con ello obtendremos los siguientes beneficios:

Acción depurativa y cáncer:

La fruta es rica en sustancias con una potente acción antioxidante y agua. Incluyéndolas con regularidad en nuestra alimentación estamos favoreciendo la eliminación de toxinas de manera natural. Esta acción depurativa nos es de gran ayuda para mantener en buen estado de salud importantes órganos como es el caso del hígado y los riñones, al mejorar su funcionamiento.

Es precisamente la presencia de gran cantidad de antioxidantes lo que hace de la fruta un alimento altamente eficaz en la prevención y lucha contra diversos tipos de cáncer. Además, su consumo nos ayuda a eliminar el exceso de ácido úrico y de colesterol malo.

Anti envejecimiento:

La fruta es rica en minerales, agua y, como ya hemos apuntado, importantes antioxidantes. Por tanto, su consumo promueve una adecuada regeneración de nuestras células, ayudándonos a evitar un envejecimiento prematuro de los tejidos. Comer fruta nos ayuda a mantenernos jóvenes.

Digestión:

Gracias a su elevada concentración en fibra, nos ayuda a mantener en buen estado de salud nuestro aparato digestivo, ya que promueve el movimiento intestinal, mejora la digestión y evita el estreñimiento.

Reducir peso:

Debido a la presencia de vitaminas, antioxidantes y fibra, su consumo aumenta nuestro metabolismo, ayudándonos a quemar grasas. Además, nuestro cuerpo se mantiene saciado durante más tiempo, evitando así picar entre horas.

Hidratante:

Por su alto contenido en agua, las frutas nos ayudan a mantener un adecuado estado de hidratación, lo que nos garantiza un correcto funcionamiento de los distintos órganos, y un adecuado estado de salud del cabello y la piel.

¿CUÁNDO Y CÓMO COMER FRUTA?

Las frutas, una vez ingeridas, no tienen un largo proceso de digestión en el estómago, sino que, rápidamente (30 min. aproximadamente), pasan al intestino delgado donde se acaban de descomponer y el organismo puede absorber todos sus nutrientes. Es por esta rápida digestión por lo que no debes combinar la fruta con otros alimentos.

La fruta debe tomarse con el estómago vacío. Al combinarla con otros alimentos, los cuales deben permanecer más tiempo en el estómago digiriéndose, la fruta podría pasar directamente por él hasta el intestino, pero el resto de comida que hemos ingerido lo impide. Mientras, al combinarse, toda la comida va pudriéndose, fermenta y se acidifica.

Por tanto, debes tomar la fruta con el estómago vacío. Puedes ingerir toda la fruta que quieras siempre que hayas digerido la comida anterior (2-3 horas) y no debes comer nada más hasta haber digerido la fruta (30-45 min.).

Otra consideración a la hora de tomar fruta, es que debe ser fresca y estar cruda. Si es fruta procesada y/o cocinada, el organismo no es capaz de obtener ningún beneficio y solo aporta un gasto energético durante la digestión.

FRUTAS Y PROPIEDADES

Manzana: Esta fruta es ideal para eliminar las células muertas de tu piel y previenen la aparición de manchas e irregularidades, de paso nutre e ilumina.

Piña: Esta fruta es considerada como una de las mejores para la piel, ya que estimula la producción de colágeno, hidrata, exfolia y combate la celulitis.

Naranja: una de las mejores fuentes de la vitamina C, también es una de las mejores fuentes para cicatrizar y tonificar la piel. El agua de su cáscara funciona como un tónico limpiador y antiarrugas.

Fresas: Las fresas calman las erupciones e irritaciones, elimina manchas y aclara la piel.

Palta: si tienes problema de resequedad en la piel, esta es tu fruta ideal, ya que está cargado de aceites vegetales y estos lo convierten en un antioxidante muy potente y natural.

Melón: Esta fruta actúa como un buen humectante, realiza un puré con una rebanada y aplícalo inmediatamente en tu cuerpo y rostro, deja actuar por 15 minutos y retira.

Uva: fruta pequeña pero poderosa, ayuda a prevenir la aparición de arrugas. Haz un puré con la cantidad de uvas que te sean necesarias, frota toda tu piel con la mascarilla obtenida y enjuaga a los 10 minutos.

 

Leer también:

Bambuterapia: estimula las células adiposas favoreciendo la reducción de grasa localizada