Cáncer de próstata: raíz de cúrcuma lo ideal

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Siendo los fitoquímicos más activos de la raíz de cúrcuma, los curcuminoides ofrecen potentes efectos beneficiosos para la salud a través de su actividad antioxidante, neuroprotectora y potenciadora del sistema inmune, por lo que resultan un extraordinario aliado para combatir el cáncer de manera natural. Un remedio natural preparado a base de raíz de cúrcuma puede aliviar los dolores de este tipo de cáncer en 120 días.

Se trata de un tipo de polifenol, conocido por sus principios antiinflamatorios y efectos antioxidantes

Un estudio publicado de la revista italiana Panminerva Medica evaluó el efecto de un suplemento de curcumina en personas con BPH (un agrandamiento de la próstata). Se dividieron sesenta y un pacientes en dos grupos para un estudio de 6 meses. Los resultados mostraron que el grupo que recibió los suplementos de curcumina experimentó un menor número de infecciones urinarias y menos incontinencia que el grupo de control. También se reportaron mejoras significativas en el flujo urinario y la calidad de vida. Los investigadores conjeturan que la curcumina, en realidad, puede ayudar al cuerpo a inhibir los compuestos que causan el agrandamiento de la próstata.

En lo que respecta a sus nutrientes, el principal componente activo de la cúrcuma es la curcumina. Se trata de un tipo de polifenol, conocido por sus principios antiinflamatorios y efectos antioxidantes. Precisamente por ello, países como Japón o Estados Unidos han publicado literatura científica sobre la activación fisiológica y la potencial eficacia de la curcumina en enfermedades como la arteriosclerosis, el Alzheimer, las enfermedades cardíacas, la depresión o el cáncer.

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CRECIMIENTO DE LOS TUMORES

En una revisión publicada en 2007 sus autores intentaron determinar la relación entre la curcumina y el cáncer, analizando los efectos antitumorales, antiinvasivos y antimetatásticos de la curcumina. Las investigaciones recogían que la curcumina es citotóxica para una gran variedad de líneas celulares tumorales de diferente origen tisular, aunque la toxicidad sea muy pequeña.

Con lo cual, la acción antitumoral de la cúrcuma depende del tipo celular, de la concentración de la curcumina y de la fase del tratamiento. Por otro lado, también explican que la curcumina inhibe el crecimiento de los tumores e incrementa la vida media de modelos animales. Asimismo, inhibe la metástasis de las células tumorales tanto in Vitro como en animales.

Del mismo modo, otro estudio cuyo objetivo era indagar sobre el mecanismo inhibidor de la curcumina en las células cancerosas en pacientes con cáncer colorrectal mostró en sus resultados mejoras en la salud de los mismos.

Un estudio realizado en el año 2015 mostró que la curcumina, la partícula responsable del color y el sabor de la cúrcuma, puede restringir señales de crecimiento celular, lo que podría ayudar a detener o debilitar la producción celular de los tumores.

Otro estudio encontró que la curcumina puede detener a los fibroblastos asociados con el cáncer, que proveen a las células malignas el tejido conectivo y el colágeno que necesitan.

La curcumina también tiene propiedades radioprotectoras y radiosensibilizadoras, contribuyendo a que las células cancerosas se vuelvan más vulnerables a la radiación mientras protege al resto de tu organismo de sus efectos secundarios.

RAÍCES QUE ALIVIAN

Las raíces de la cúrcuma se hierven, secan y después se muelen para formar un polvo fino. Éste se utiliza como especia, pero también como colorante textil y para hacer remedios naturales.

Puedes encontrar presentaciones comerciales de cúrcuma como suplemento, extracto fluido y tintura herbal.

La dosis estándar de suplementos con curcumina es de 500 miligramos, que equivalen aproximadamente a media cucharadita de polvo al día. Las dosis de más de 1500 miligramos pueden causar efectos secundarios.

Si no deseas tomarla como suplemento, puedes agregarla como especia a tus alimentos. Puedes usarla en la ensalada de huevo, en la coliflor asada y en el arroz integral. Para mejores resultados, agrega también pimienta negra en la receta, pues contiene activos que ayudan a tu cuerpo a absorber mejor la curcumina.

También puedes hacerte una rica infusión combinando cúrcuma, canela, clavo y nuez moscada. Si lo combinas con leche y algo de miel obtendrás otra bebida curativa y deliciosa.


RECETA

Ingredientes

  • 1 raíz de cúrcuma
  • 4 tazas de agua
  • 1 cda. de jugo de limón o kion rallado
  • 1 cda. de miel

Instrucciones

  1. Pon a hervir la raíz de cúrcuma. Una vez lista, colar.
  2. Sirve el té y posteriormente agrega la miel, el jugo de limón o el kion.
  3. ¡Listo! Prepáralo de 2 a 3 veces por semana y goza de sus beneficios.