El insomnio es la falta de sueño a la hora de dormir; de hecho, se considera como la dificultad para iniciar el sueño. Lo cierto es que esta dificultad para puede tomar varias formas, desde no poder hacerlo en absoluto, hasta despertar durante varias ocasiones en ese lapso.
El estrés es una de las principales causas que alteran el proceso de sueño normal, además del uso de estimulantes, consumo de alcohol, cambio en las rutinas de dormir, falta de actividad, problemas médicos o trastornos psicológicos y respiratorios.
- Aceites esenciales. Los aceites esenciales indicados para combatir el insomnio son el de melisa y lavanda. Pueden colocarse en hornillos para oler sus fragancias, rociarse en la cama, las sábanas y almohadas o en baños de inmersión, antes de acostarnos.
- Té caliente. Diversos tipos de té como de azahar, manzanilla, tila, valeriana, flor de pasión, eucalipto, rosa, melisa y sándalo, pueden ayudar a calmar el sistema nervioso, preparándote para el sueño.
- Leche y miel. Un vaso de leche tibia endulzada con miel antes de acostarse es efectivo para alcanzar un sueño reparador. Esta bebida, a diferencia del resto, puedes tomarla 15 o 20 minutos antes de intentar dormir.
- Lechuga.Hierve el tronco de una planta de lechuga en una olla pequeña durante 3 minutos. Sírvelo en una taza y bébelo antes de dormir.
- Infusión de naranja y limón.Pon a hervir un poco de agua con algunos trocitos de cáscara de naranja o de limón. Bébelo una hora antes de dormir, un muy buen relajante.
