Evita los calculos, infecciones, quistes, tumores y hasta insuficiencia renal
En esta vida veloz y llena de estrés estamos expuestos a una variedad de toxinas. Las indulgencias poco saludables en la forma de comida rápida, estimulantes como el café y las fiestas son cosas que nos ayudan a sobrevivir al veloz ritmo en que progresan nuestras vidas. ¿Y quiénes realmente están a cargo de excretar estas toxinas de nuestro sistema? Un par de órganos con forma de frejoles alojados en un rincón de la cavidad abdominal.
Trabajan día y noche, 24 horas, los 7 días de la semana para filtrar estas toxinas dañinas. Cuando la carga de toxinas se vuelve demasiado grande para estos pobres riñones, su funcionamiento se vuelve más lento, haciendo que nos volvamos más susceptibles a los cálculos, infecciones, quistes, tumores y finalmente insuficiencia renal.
BEBE GRAN CANTIDAD DE AGUA
Lo más importante para desintoxicar tus riñones es tener un alto consumo de agua limpia y natural. Beber de diez a doce vasos de agua al día ayuda a filtrar las toxinas acumuladas. Un buen indicador de esto es tener una orina transparente sin mucho olor. Si la orina tiene un color más intenso que un amarillo pálido, significa que está concentrada. La orina transparente indica un sistema de filtrado limpio. Los líquidos tales como las bebidas gaseosas, el cafés y las bebidas gasificadas no son un buen sustituto para el agua natural.
LLENATE DE AGUA
Las frutas y las verduras con alto contenido de potasio ayudan a limpiar los riñones. Las frutas cítricas como la uva, lima dulce, naranja, melón, plátano, kiwi, albaricoque y ciruela son fuentes ricas de potasio. La leche y el yogur también son una buena fuente de este mineral.
Incluir estas frutas en tu dieta diaria te ayudará a mantener el nivel de electrolitos en tu sangre, lo que a su vez permitirá el funcionamiento óptimo de tus riñones. Se sabe que consumir un vaso de jugo de uva diario en la mañana o en la tarde ayuda a depurar el exceso de ácido úrico, un subproducto del filtrado renal.
Es necesario tener un consumo equilibrado de comida rica en potasio. El consumo excesivo de potasio puede dar lugar a una condición conocida como hiperpotasemia la cual puede ser fatal y ocasionar un paro cardiaco. La gente que tiene problemas en los riñones, tales como fallas renales, no puede consumir demasiado potasio. Una persona saludable puede consumir hasta 5 gramos de potasio al día.
