La respuesta de las autoridades es crucial en este momento de angustia para la comunidad
La violencia en La Libertad ha alcanzado niveles alarmantes, con dos nuevos casos de homicidio que han sacudido a la población y elevado la cifra de muertes violentas a 81 en lo que va del año. Estos sucesos, ocurridos en menos de 24 horas, han sembrado el temor en El Milagro y Virú, localidades que claman por justicia y seguridad.
El primero de estos lamentables incidentes tuvo lugar en Los Claveles, El Milagro, donde Celso Aguirre Palacios perdió la vida a manos de individuos que lo atacaron desde una motocicleta. El segundo caso ocurrió en Calunga, Virú, donde Jhon Salinas Morales fue hallado sin vida, víctima de un disparo en la cabeza.
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La respuesta de las autoridades es crucial en este momento de angustia para la comunidad. Los habitantes exigen una rápida y efectiva investigación para esclarecer los hechos y detener a los responsables. La Policía Nacional ha asegurado estar tomando medidas para resolver estos crímenes y ha instado a la ciudadanía a colaborar con cualquier información relevante.
Sin embargo, el panorama es desafiante, especialmente considerando las limitaciones presupuestarias en materia de seguridad ciudadana en la región. Con un presupuesto anual per cápita de apenas S/ 111, La Libertad se encuentra entre las regiones con menor asignación para combatir la criminalidad. Esta situación plantea un desafío adicional en los esfuerzos por garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Mientras tanto, la provincia de Trujillo continúa siendo la más afectada por la violencia, seguida de cerca por Pacasmayo y Virú. Los recientes crímenes han incluido desde ataques explosivos hasta homicidios perpetrados por sicarios extranjeros, lo que subraya la complejidad y gravedad de la situación en la región.
En medio de este panorama sombrío, la comunidad de La Libertad espera respuestas contundentes por parte de las autoridades y medidas efectivas para detener la espiral de violencia que amenaza la tranquilidad y la seguridad de todos sus habitantes. La lucha contra la delincuencia requiere un compromiso conjunto de la sociedad y las instituciones para alcanzar la justicia y la paz que tanto anhelan.
