Tras meses atrapados en el espacio, dos astronautas están más cerca de regresar a casa gracias a la misión Crew-10 de SpaceX.
Tras más de nueve meses en la Estación Espacial Internacional (EEI), los astronautas estadounidenses Butch Wilmore y Suni Williams están un paso más cerca de regresar a casa.
La misión Crew-10, lanzada este viernes desde el Centro Espacial Kennedy en Florida, tiene como objetivo traer de vuelta a los astronautas varados debido a fallas en la nave Boeing Starliner.
El lanzamiento se realizó con éxito a las 19H03 locales (23H03 GMT) a bordo de un cohete Falcon 9, que transporta una cápsula Crew Dragon con cuatro tripulantes: las astronautas de la NASA Anne McClain y Nichole Ayers, el japonés Takuya Onishi y el ruso Kirill Peskov.
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La misión partió luego de superar un retraso técnico ocasionado por una «bolsa de aire» en el sistema de apoyo en tierra, la cual fue identificada y corregida tras una inspección exhaustiva.
Inicialmente, el regreso de Wilmore y Williams estaba planeado a bordo de la nave de Boeing, pero fallas en el sistema de propulsión obligaron a la NASA a cambiar de estrategia.
Para garantizar la seguridad de los astronautas, la agencia decidió enviar la Starliner vacía y emplear la nave Crew Dragon de SpaceX para el retorno a la Tierra.
Se estima que el regreso de los astronautas ocurra el próximo miércoles, días después de la llegada de la nueva tripulación.
El incidente adquirió un giro político cuando el expresidente Donald Trump acusó a su sucesor, Joe Biden, de haber abandonado deliberadamente a los astronautas.
Elon Musk, ahora cercano colaborador de Trump, aseguró que el rescate podría haberse realizado hace mucho tiempo, aunque no detalló cómo lo haría.
A pesar de las tensiones políticas, el enfoque sigue siendo el rescate seguro de los astronautas.
Aunque la guerra en Ucrania ha afectado diversas relaciones internacionales, la cooperación espacial entre Estados Unidos y Rusia se ha mantenido firme.
El reciente lanzamiento de SpaceX incluyó tanto a astronautas estadounidenses como a un cosmonauta ruso, mostrando que la colaboración en el espacio sigue siendo prioritaria.
El aterrizaje de la Crew Dragon está programado en la costa de Florida y se realizará con el uso de paracaídas, asegurando un retorno controlado y seguro.
Con esta misión, la NASA y SpaceX consolidan una alianza estratégica que refuerza la capacidad de rescate en situaciones críticas, garantizando la integridad de los tripulantes atrapados en la EEI.
