El cuerpo humano dispone de un sistema circulatorio llamado sistema linfático, este se encarga de transportar la linfa lentamente nutriendo, reparando, renovando, rejuveneciendo, limpiando de residuos tóxicos y defendiendo al organismo por la acción de los anticuerpos elaborados por los glóbulos blancos que componen la linfa.
Repara, rejuvenece y limpia los residuos tóxicos, defendiendo y renovando al organismo
Se trata de una terapia manual que se realiza ejerciendo una presión muy suave a través de movimientos pausados y armónicos. Las maniobras son indoloras y se llevan a cabo en sentido circular. Para las miradas más inexpertas puede parecer un simple masaje, pero es mucho más. A grandes rasgos podemos decir que la linfoterapia actúa sobre el sistema linfático que es el encargado de eliminar toxinas y mantener en forma el sistema inmunitario.
¿EN QUÉ CONSISTE?
Un tratamiento a largo plazo de esta terapia se divide básicamente en dos partes. La primera intensiva, la segunda de mantenimiento.
En la primera fase lo que el terapeuta busca es que el paciente reduzca drásticamente los problemas que lo afectan. De este modo, las sesiones son intensas y muy concentradas, pudiendo llegar al punto de tener sesiones todos los días, estando éstas condicionadas por la gravedad del caso. Las sesiones pueden durar entre tres y ocho semanas.
En la segunda fase, la fase de mantenimiento, lo que el terapeuta buscará es que el accionar de la Linfoterapia quede instalado y actuando en el cuerpo del paciente una vez la terapia haya dejado de aplicarse. Así, las sesiones se estirarán a una frecuencia semanal, quincenal y luego a revisiones mensuales hasta conseguir la plena independencia del paciente.
Es importante que al ingresar a esta fase el paciente sea consciente de que su colaboración es crucial en el desarrollo de ella. Por ello se recomienda que realices algunos ejercicios elásticos o que tomes clases de yoga o de pilates. También puede llegar a ser necesario que el paciente acuda a un fisioterapeuta especializado.
BENEFICIOS
- Fortalecer el sistema inmunológico ya que si lo realizas con frecuencia estimula el movimiento de la linfa y la acción de los ganglios linfáticos eliminando las sustancias de desecho del organismo. Por eso también decimos que tiene un efecto depurativo.
- Combatir el acné y embellecer el aspecto de la piel.
- Mejorar la calidad del tejido disimulando cicatrices (incluso las que generan queloides) y quemaduras.
- Disminuir la tensión emocional envolviéndote en un remanso de paz y relajación y luchando contra el estrés y la ansiedad.
- Problemas de celulitis, ya que la linfoterapia colabora en la eliminación de la piel de naranja.
- Cuidar de las dermatitis de la piel o eczemas.
- Como tratamiento después de una cirugía estética (aumento de pecho, liposucciones o abdominoplastias, por ejemplo) favorece la recuperación ya que acelera el proceso de cicatrización de los tejidos.
- Mejorar la circulación sanguínea.
- Efectivo contra la retención de líquidos.
- Al actuar sobre el sistema nervioso vegetativo alcanzamos un estado sedante y de relax.
- Tiene un efecto antifatiga eficaz en piernas cansadas o hinchadas.
- Ayuda en el tratamiento de edemas de distinto tipo: en una gestación, faciales, por problemas renales, del sistema nervioso, premenstrual, postoperatorios, etc.
- Muy útil para tratar varices.
- Mejorar las migrañas, dolores de cabeza e incluso los vértigos.
- Regula el tono muscular.
APLICACIONES
- Acné
- Celulitis
- Edemas
- Varices
- Artritis, artrosis y afecciones partes blandas (capsulitis, tendinitis, etc.)
- Hematomas
- Nervios y ansiedad
- Luxaciones y desgarros musculares. Muy indicado para la recuperación de deportistas.
RECOMENDACIONES
El drenaje linfático manual debe llevarse a cabo antes de un tratamiento o entre 7 y 10 días después, para evitar que cualquier producto utilizado sea desechado. Está contraindicado en fiebre, cáncer u otras enfermedades malignas, edema cardiaco, crisis asmática, tromboflebitis, y reacciones alérgicas graves. La duración media aproximada de un tratamiento de drenaje linfático manual, oscila entre 45 y 60 minutos.