Difunden imágenes de asesor que murió dentro del Congreso

La muerte de Gustavo Trujillo Benguer, ex asesor parlamentario, en marzo de 2019, volvió a ser tema de interés público este domingo. Esto ocurrió después de que la Intendencia de Fiscalización de la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) anulase una sanción económica sustancial por negligencia durante la atención médica que recibió previamente en el área médica del Congreso. Este hecho se reportó en un informe transmitido por el programa Cuarto Poder.

En un principio, el órgano regulador recomendó imponer una multa de un millón de soles al Parlamento. Sin embargo, tras enterarse de que el caso se haría público, la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) revocó esa advertencia y emitió una resolución final que exoneró por completo al Poder Legislativo de cualquier responsabilidad.

Gustavo Trujillo comenzó a desempeñar sus labores en la oficina del exdiputado fujimorista Ángel Neyra cuando experimentó un intenso dolor en el pecho, siendo esta la segunda ocasión en la misma semana. Por lo tanto, decidió dirigirse al centro de atención médica primaria. Sin embargo, aproximadamente una hora después de su llegada, comenzó a presentar una disminución de sus signos vitales, a pesar de que el personal médico no disponía de un equipo crucial, como un desfibrilador, en ese momento.

“Ese 4 de marzo, Gustavo sale como cualquier día de semana, un lunes, y se dirige a su trabajo […] llega al tópico y le dan un alprazolam, una pastilla para que se calme porque debe ser estrés. Hasta que una vez que se cae de la camilla comienza la reacción. Eso es lo indignante”, contó al dominical Vanesa Ingar, viuda del exasesor, quien ha quedado al cuidado de dos hijos.

Galenos

Gustavo Trujillo, un economista graduado de la Universidad Agraria La Molina, especializado en comercio exterior y con experiencia como docente universitario, ingresó a la consulta médica a las 10:15 horas, aproximadamente veinte minutos después de su llegada al área médica. Las imágenes de una cámara de seguridad lo capturaron entrando y saliendo al menos en tres ocasiones. Más tarde, recibió atención médica por parte de dos doctores de la Clínica Internacional, debido a un acuerdo de convenio que el Congreso tenía con una empresa de seguros.

Uno de esos especialistas fue la doctora Giovanna Alcalde, quien constató que no presentaba alteraciones aparentes después de practicarle un electrocardiograma. “Aproximadamente, ocho minutos después, la doctora escucha un golpe fuerte, sale de inmediato y encuentra al paciente en el suelo y de cúbito ventral”, detalla el informe médico citado en el reportaje.

Para intentar reanimar a Trujillo, se le administraron múltiples descargas eléctricas en el área del pecho, lamentablemente, sin éxito. Según las imágenes, Miguel Marquina, quien ocupaba el cargo de jefe del grupo funcional del servicio médico del Congreso, rápidamente consiguió una camilla en la que el exasesor parlamentario sería trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos. Sin embargo, lamentablemente, allí finalmente falleció.

Cuatro años más tarde, Susalud emitió una resolución que, de forma arbitraria, descartó por completo el informe sancionador elaborado por su propia Intendencia de Fiscalización. Este informe sancionador señalaba la atención médica sin registro y la falta de un seguimiento adecuado a los síntomas del ex economista después de recetarle un medicamento que, según la literatura médica, se utiliza para tratar los estados de ansiedad, especialmente en casos de crisis de angustia, agorafobia, ataques de pánico y estrés intenso.

“Cómo es posible que en un informe donde se sanciona e incluso se calcula la multa que se le pone al Congreso de 206 UIT quede desestimado para que luego salga una resolución en la que se absuelve de toda culpa a esa IPRES que no cumple con las normas, contradiciéndose la misma Susalud, el ente que debe velar porque se cumplan los servicios de salud como debe ser. Esto es indignante”, cuestionó la viuda de Trujillo.