Este año la pandemia ha obligado a las empresas y a los trabajadores a adaptarse al trabajo remoto. Hasta junio, el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) calculaba que unas 200,000 personas se encontraban laborando bajo esta modalidad.
Ante esto, un informe de Global Research Marketing (GRM) brinda más detalles de los avances y complicaciones que aún existen con este modo de trabajo. Para un 85% de limeños el trabajo remoto implica más horas de las que realizaban antes del confinamiento social, cuando el trabajo era presencial.
«Lo que ha sucedido es que al adaptarnos a esta modalidad es como que no hubiera límites y más bien se diera una continuidad laboral en cuestión de horas. Esto genera también que a los trabajadores les cueste desconectarse y establecer límites entre su vida laboral y familiar«, indica Giuliana Reyna, gerente general de la consultora GRM.