Una semana después del encuentro del presidente Nicolás Maduro con Richard Grenell, enviado del presidente Donald Trump, en el que se discutieron temas migratorios, entre otras cosas, el “zar de la frontera”, Tom Homan, ofreció la primera línea de tiempo sobre el plan de deportaciones a Venezuela.
Homan dijo que los vuelos con migrantes deportados a Venezuela empezarán “dentro de los próximos 30 días”.
Maduro ha dicho que está dispuesto a recibir a los migrantes venezolanos. “Nosotros sí queremos que vuelvan. Si por allá no los quieren, nosotros sí los queremos, con amor, y abrimos nuestros brazos”, señaló Maduro durante una sesión del Consejo Federal de Gobierno a finales de enero.
La administración de Trump puso fin al Estatus de Protección Temporal (TPS) para migrantes venezolanos que ya residen en Estados Unidos.
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Cientos de miles de venezolanos a los que se les concedió el TPS en 2023 y esperaban contar con el permiso para trabajar y evitar la deportación hasta finales del otoño boreal de 2026 perderán las protecciones el 2 de abril después de que la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, decidiera no extenderla.