La Iglesia Protestante alemana enfrenta una crisis tras un revelador informe de abusos sexuales.
La investigación independiente encargada por la iglesia revela que más de 1.200 miembros, de diferentes rangos, han cometido abusos sexuales contra 2.225 víctimas en las últimas décadas. Este número podría ser solo la punta del iceberg, según los investigadores, quienes sugieren que la cifra real podría acercarse a las diez mil víctimas.
Los líderes religiosos, con la obispa Kirsten Fehrs a la cabeza, expresan conmoción y ofrecen disculpas sinceras a aquellos heridos. Víctimas que han luchado por la verdad instan a otros a salir a la luz. Katharina Krach, víctima de abusos sexuales, señala que la Iglesia Evangélica enfrenta un problema con la violencia sexualizada y la falta de apoyo adecuado a las víctimas.
Este informe sacude a la Iglesia Protestante en Alemania, recordando un escándalo similar en la Iglesia católica del país años atrás.
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