El cuerpo de Ojeda fue descubierto en una barriada en la comuna chilena de Maipu
En un giro desgarrador, la Fiscalía chilena confirmó el hallazgo del cuerpo de Ronald Ojeda, un militar retirado venezolano y disidente del gobierno de Nicolás Maduro. El macabro descubrimiento se produce una semana después de su secuestro en Santiago, dejando a la nación sudamericana en estado de conmoción.
El fiscal Héctor Barros informó sobre la identificación de los restos, señalando que Ojeda había sido víctima de un secuestro.
A pesar de la revelación, la Fiscalía ha mantenido en secreto las motivaciones detrás del crimen, calificando la investigación como “compleja” y vinculada al crimen organizado. Barros anunció la existencia de dos órdenes de detención adicionales, intensificando el misterio en torno a este trágico suceso.
Una zona ocupada mayormente por invasores de terrenos, añadiendo capas de complejidad a la investigación.
También te podría interesar:
La noticia impacta aún más al revelar que el gobierno chileno había otorgado a Ojeda, de 32 años, la calidad de refugiado. En sus redes sociales, el exmilitar se autodefinía como “expreso político” y “oficial de las Fuerzas Armadas Venezolanas”, lo que arroja luz sobre posibles motivaciones tras su trágico destino.
El secuestro de Ojeda generó gran expectación en Chile y Venezuela, alimentando especulaciones de una operación de inteligencia del gobierno de Maduro, según disidentes venezolanos. La unidad especial de crimen organizado de la policía chilena, encargada de la investigación, también está involucrada en operaciones contra bandas internacionales.
Ante la incertidumbre, el gobierno chileno activó protocolos de seguridad, alertando a Interpol y reforzando fronteras para evitar una posible salida de Ojeda del país. Chile, hogar de aproximadamente un millón de ciudadanos venezolanos, ahora se enfrenta a la trágica realidad de la violencia que ha llegado a sus puertas.
