Nuevos detalles del caso de Gabriela Sevilla salen a la luz. Tras las declaraciones de Ramiro Gálvez, pareja de Gabriela, ante la División de Investigación de Personas Desaparecidas de la Dirincri, todo hace indicar que cada vez está más cerca el momento de conocer toda la verdad.
Según contó Gálvez ante la PNP, su hija “Martina” debió haber nacido en septiembre, pero no fue así. Tras ello, Ramiro comenzó a sospechar del embarazo y le reclamaba a Gabriela para ir a una especialista. El 19 de octubre, él fue a la casa de Gabriela Sevilla para ir a un hospital y ver al bebé, pero ella se negó. Tras ello él le reclamó y le dijo que está estaba comenzado a dudar de su embarazo.
Al escuchar esto, Gabriela Sevilla lloró y se enojó por dudar de ella. Un día después, la joven comunicó a su familia que se le rompió la fuente y que se dirigía a la clínica a bordo de un taxi. Lo demás es historia conocida. Ramiro Gálvez también contó que él fue a la clínica Internacional y allí le dijeron que Gabriela no había realizado exámenes de embarazo.
Leer también [Policía Nacional y Fiscalía allanaron casa de Gabriela Sevilla para realizar investigaciones]
Luego busco las ecografías y las recetas de otros centros de salud donde Gabriela se había atendido y notó que eran de lugares de dudosa reputación y que algunos exámenes médicos se habrían falsificado. Gabriela Sevilla tiene mucho que aclarar, fue citada el pasado sábado para declarar en la sede de la Dirincri, sin embargo no asistió, en las próximas horas se reprogramará la cita y tendrá una nueva oportunidad de aclarar su polémico caso.
