La huida de Eliane Karp a Israel ha complicado la recuperación de ocho propiedades en Perú, valuadas en 20 millones de soles, y una cuenta bancaria, pertenecientes a ella, Alejandro Toledo y su suegra Eva Fernenbug, en el caso Odebrecht. Karp se benefició de una ley que modificó los plazos de prescripción de delitos, usando esta norma para evitar que los bienes pasen al Estado.
El fiscal Francisco Avellaneda Esaine explicó que el cambio de domicilio a Israel dificulta las notificaciones legales, y hasta que Karp responda a la demanda, el Estado no puede tomar posesión de los activos. El proceso legal se complica por el traslado a Israel, en contraste con un proceso más fluido si hubiera permanecido en EE. UU.
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La audiencia para extinguir su dominio sobre los bienes no ha podido realizarse en casi medio año. Esta situación pone de manifiesto los desafíos legales y de notificación que surgen cuando los involucrados se encuentran en diferentes países, retrasando la resolución del caso Odebrecht.
